A través de evidencia científica moderna, testimonios y una extensa investigación, la Oficina de Crímenes Mayores de la Policía logró hoy la radicación de cargos contra los sospechosos de un asesinato que ocurrió hace 31 años.
Se trata del caso más antiguo que haya sido sometido en la historia de la Policía de Puerto Rico, informó la sargento Karina Ojeda, directora de la Oficina de Crímenes Mayores de la Uniformada.
“Nunca se habían radicado cargos después de que pasara tanto tiempo desde los hechos”, sostuvo Ojeda.
Los hermanos Francisco Cotto Rodríguez y Jimmy Cotto Rodríguez fueron acusados de asesinato en primer grado. Se les imputa haber baleado a Tomás Ledoux el 19 de mayo de 1986, en su residencia en Barrio Obrero, San Juan.
Se alega que también participaron otras dos personas en el crimen, uno de los cuales –Miguel Bermúdez Torres– fue asesinado al año siguiente en el residencial López Sicardó.
De acuerdo con la investigación, los dos hermanos y Bermúdez Torres entraron a la casa, y balearon a Ledoux, mientras que también resultó herida su abuela, doña Francisca.
La pesquisa fue asignada a la División Especializada de Crímenes Mayores el 6 de octubre de 2016 y se le asignó al agente Andrés Padilla Colón, quien logró el esclarecimiento.
Ambos fueron procesados por el Código Penal de 1974, que también establece una pena máxima de 99 años de cárcel por el artículo 83 de asesinato en primer grado.
El delito de asesinato no prescribe, por lo que las autoridades pueden someter las acusaciones en cualquier momento.
El juez José Luis Parés Quiñones encontró causa para el arresto contra ambos y les impuso una fianza de $1 millón a cada uno.
Ninguno de los dos llevó abogados ni emitieron expresiones a su salida de la sala de investigaciones del Tribunal de San Juan.
La vista preliminar fue pautada para el 4 de enero de 2018.