El Negociado Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) arrestó en la madrugada de este martes a 10 agentes de la Policía de Puerto Rico implicados en casos de corrupción mientras laboraron en la División de Drogas de San Juan.
Según informó el jefe del FBI en la Isla, Carlos Cases, un gran jurado federal emitió las acusaciones contra los agentes tras una investigación que se ha realizado por el pasado año.
«Esta investigación comenzó hace más de un año y culmina hoy con los arrestos», indicó Cases a este medio.
Agregó que «esta investigación no tiene nada que ver con el asesinato del agente Miguel Pérez Ríos». Este agente fue ejecutado el 7 de septiembre en una gasolinera del Camino Alejandrino, en San Juan. Había laborado en la División Drogas San Juan, pero al momento de su muerte estaba adscrito al cuartel de Caimito.
Cuando se le preguntó si Pérez Ríos fue investigado en algún momento relacionado a esta pesquisa, indicó que «no puedo confirmar ni negar eso».
Los arrestos se realizan en varios municipios de la Isla, pero principalmente en la zona metropolitana. Algunos ocurrieron cuando los agentes terminaron sus turnos en los cuarteles a los que están asignados y otro se realizó en una residencia de Caimito, San Juan.
Este medio supo que el arrestado en Caimito fue el teniente Luis Flores, quien dirigió la División de Drogas en San Juan hasta que fue desmantelada en el 2012. En ese entonces, trascendió que el FBI realizaba investigaciones sobre esa unidad y se investigaba un alegado allanamiento ilegal en el apartamento de la transexual Ivana Fred.
No obstante, fuentes de este medio desvincularon la pesquisa federal del caso de Fred.
Los arrestados esta madrugada ya fueron trasladados al Tribunal de Distrito federal, en Hato Rey. Comparecerán a la vista inicial ante el magistrado federal de turno, Marcos López.
Se espera que se ofrezca más información sobre los arrestos a las 11:00 a.m. en una conferencia de prensa de la Fiscalía federal en San Juan. A la misma asistirá el superintendente de la Policía, José Luis Caldero, según indicó su portavoz de prensa, Maricarmen Ortiz.
“Vamos a esperar que los federales se expresen y después nosotros podemos dar una expresión”, dijo Ortiz, cuando este medio le solicitó una entrevista con Caldero para obtener una reacción sobre los arrestos.
No tolerará la corrupción
El que ya se expresó sobre la intervención federal fue el jefe del Negociado de Drogas, José Juan García, área más impactada con estos arrestos por corrupción.
“Yo lo que sé es que hay varios agentes de drogas y otros que no estaban allí”, dijo.
Detalló que “arrestaron una compañera que estuvo en Drogas San Juan y ahora está en Drogas Carolina y la arrestaron en la casa”.
Figura entre los arrestados, además, un sargento que laboró también en Drogas San Juan y fue trasladado a un precinto o distrito del área de Bayamón. García cree que era supervisor en Toa Baja.
“Hay un agente en Drogas San Juan y ahora está en (Drogas) Ponce. Cuando yo dirigí Droga San Juan, lo moví a Ponce”, afirmó el funcionario policiaco.
Añadió que “hay otros más pero no sé quieren son o no me han informado quienes son”.
Asimismo, García dijo desconocer el motivo de los arrestos. Comentó que tampoco especularía sobre ello.
Señaló que como jefe del Negociado de Drogas “nos hemos mantenido monitoreando toda información que nos llega a nosotros (sobre corrupción dentro de la Uniformada) y la otra la referimos a distintas agencias. Nosotros no vamos a claudicar en eso. La persona que esté violando la ley tiene que cumplir. Se va a arrestar sea por la Policía o por la agencia federal. El país puede estar seguro que el agente que viole la ley se va a procesar y con mano dura, tiene que responder por los actos que cometa. No vamos a tolerar violaciones de ley aquí”.
“No vamos a tolerar la corrupción de ninguna manera y la persona que viole la ley en la Policía, que sepa que lo vamos a arrestar y si no lo arrestamos nosotros, lo va a arrestar cualquier agencia que tenga la prueba”, agregó García.
Anticipados los arrestos
El pasado 16 de septiembre el jefe de la Policía confirmó que el FBI tenía una investigación activa contra agentes de la Uniformada y anticipó estos arrestos que este martes se han efectuado.
“Hay investigaciones pendientes y van a haber acusaciones de miembros de la Policía por actos de corrupción… Hay unas investigaciones que se están desarrollando y nosotros estamos administrando con total transparencia. La División de Asuntos Internos de la Policía está haciendo un trabajo importante y van a haber arrestos dentro de la Policía”, señaló.
Diego Figueroa, presidente del Frente Unido de Policías Organizados (FUPO), anticipó que estos arrestos serían por violaciones de derechos civiles, robos de drogas, y de oficiales vinculados a elementos de narcotráfico, entre otros.
El teniente Flores dirigía una unidad que fue desmantelada en mayo de 2012 por el entonces superintendente Héctor Pesquera, quien suspendió en aquel momento a cuatro supervisores y removió a una quinta parte de sus agentes en medio de la pesquisa sobre el allanamiento en el apartamento de Fred, quien alegó le hurtaron $2,200. Además de las acciones contra esos cinco oficiales, también reubicaron a 17 agentes de la misma división.
Al desmantelar la unidad, Pesquera dijo que también la división era objeto de una investigación relacionado a una querella sometida por la joven dominicana de 22 años, Yotcasti Paredes, el 14 de octubre de 2011. Paredes alegó que agentes le habían robado drogas y cerca de $10,000 en su casa.
Mientras se investigaba su querella, Paredes fue asesinada el 21 de noviembre, presuntamente por un hombre de 29 años, identificado como Jorge Ocasio Colón, alias Grasita, un sicario que a su vez murió al intercambiar disparos con las personas que acompañaban a la joven.
Unos días antes del anuncio de Pesquera, este medio publicó que el FBI evaluaba al menos uno de los incidentes por los que las autoridades investigaban en aquel momento a agentes de la División de Drogas de San Juan. Según las fuentes, el FBI había ocupado evidencia y había entrevistado a testigos relacionados al caso de Paredes.
En los pasados cinco años el cuerpo policiaco ha estado en la mirilla de las autoridades federales por casos de corrupción que han propiciado el arresto de más de 100 uniformados.
En 2010, el operativo «Guard Shack» llevó a que se emitieran 133 acusaciones, de los cuales 89 eran policías imputados de afectar investigaciones y ayudar en transacciones del narcotráfico, entre otros delitos.
Tres agentes fueron arrestados en 2013 por interferir en una transacción de drogas controlada por el FBI y llevarse el dinero que usó el confidente para comprar las sustancias controladas.
En mayo de 2014, un grupo de 16 miembros de la Policía fueron acusados en el operativo «Cantazo azul», que cometían actos de robo, extorsión, venta de sustancias controladas y manipulación de expedientes a cambio de sobornos.
Mientras, a principio de este mes arrestaron al agente Francisco Martínez Mercado, que estaba destacado en el «task force» del Negociado Federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés), por conspirar, combinar, confederar y acordar, herir, amenazar e intimidar un individuo en el ejercicio de su derecho constitucional de no ser rebuscado injustificadamente y que se le confiscara propiedad.